Hablando conmigo mismo. Palabras y mas palabras

Cosas raras que demuestra que la bola reina en el corto plazo.
Alguien pensaría que el croupier ha puesto la bola con la mano en la casilla. 


Casino Bad Benteim 30/07/01 (mesa 4)




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Esto es el corto plazo, la bola juega con nosotros, a menos que...


Ésto sí que provoca que hable conmigo mismo contínuamente. Y no hay que decir palabras y mas palabras. La permanencia lo dice por sí misma.

gamabi77 escribió:"Cada permanencia tiene un sistema ganador dentro de dicho juego.
Solo es cuestión de encontrarlo para nuestro propio beneficio"

Gabriel.M.B.

No hay duda de eso estimado.

Seguramente el trabajo duro es encontrar de continuo el sistema ganador a medida que la permanencia avanza.

El texto siguiente lo escribí hace 10 años en el foro joker.

Una relectura a tantos años vista resiste mus actuales pensamientos y opiniones acerca del juego. Después de tanta escritura y aprendizajes de otros que han mejorado muchísimo el conocimiento del azar, hay una base o raíz a la que no renuncio.

 En estos cortos relatos auténticos -no ficción- el sufrido lector va a identificar enseguida a dos tipos de jugadores, el que yo llamo Jugador Habitual y el Jugador Profesional. 
 
El "jugador habitual" es aquel que va al casino a menudo, juega desordenadamente tenga sistema o no lo tenga, y habitualmente pierde. Su comportamiento le hace perder, creo que casi todos lo hemos visto o experimentado. Bueno, como iba diciendo del jugador habitual, siempre pierde, pero la culpa según él siempre recae en tres elementos básicos: el crupier, la bolita y el casino en general. 
 
Por otro lado está el "jugador profesional" un dechado de virtudes, un personaje envidiado, ¿alguien conoce a alguno? Sabe lidiar casi cualquier permanencia, tiene infinita paciencia y un largo "etc". 
 
Si hablamos de la ruleta, cómo no, también hablamos de sistemas. Para mi sorpresa descubrí bien pronto que todos los sistemas son buenos, todos funcionan, esa es la buena noticia, la mala es que no todo el tiempo o mejor dicho, no en toda la permanencia ¿Coincidirá mi permanencia con el sistema que use en ese momento? También descubrí tres tendencias básicas en chances simples fácilmente visibles en el luminoso de cada mesa y a las que se les puede sacar punta sin saber demasiado de estadísticas y otras cuestiones difíciles de comprender. Espero les guste y no se aburran demasiado. 
 
Espero y deseo críticas constructivas.

Les pondré en el siguiente lo que el forista Goodhand contestó a mi post.

Yo lo recomiendo.

Es un buen disolvente de tus dudas.

Pone tus ideas en orden.

A veces incita a los trolls. Esos geniecillos malhumorados que en imitación a aquel enanito de blancanieves decia; "odio odiar, odio tener que levantarme, odio que otros sean más buena gente que yo".

También mejora nuestra circulación.

Quizá... esto no lo puedo asegurar, sea bueno para el colesterol.

Entretiene.

Aleja de tu vida el chocheo si es que eres mayor.

En fin. Una medicina para todo.

Y es...

Hablar a menudo con uno mismo... muuuuchas palabras.

Saben que es daño colateral? 

Pues que algún subnormal se ponga a poner negativos a todos los post. Y claro como no lee y lo hace en serie, los que comentaron también van al saco. Sufrieron el daño colateral. 


Bueno, voy a mejorar un poco a ver si saco el aprobado o al menos la indiferencia del idiota del dedo con prurito de negativos.

Comentaba no hace mucho con un jugador de ruleta (digamos con un jugador de nuestro estilo; querer ganar con nuestras neuronas) que a pesar del candado matemático ese tan famoso (los matemáticos tienen la gracia de tomarse a pechos todos los axiomas habidos y por haber) y entonces sacaron eso del candado.

Los jugadores de nuestro estilo nos reímos de ese candado. No nos reímos de los matemáticos porque son personas respetables. 

El famoso candado matemático tiene que ver con unas cuentas. También con un concepto. Lo del concepto son palabras mayores. La probabilidad de acertar una chance es menor que el 50% por culpa de la manía de la banca de tener un número propio y gratis. No es culpa de los matemáticos que solo hacen su trabajo.

Así que tenemos que lidiar con un porcentaje del 2.7 en contra pero que sepamos ese 2.7 no es un candado hermético. Hemos descubierto que los conceptos y la gestión son llaves para abrirlo.

Como en mi relato corto de la probabilidad, es éste un parámetro al que estamos ligados lo queramos o no.

No. No voy a aconsejar como en el cuento que hagamos una sola apuesta a chances y retirarnos para siempre. En ese caso se cumpliría una probabilidad pero quedamos capados de la gestión.

Y bueno, a esto quería llegar; el papel de la gestión en el rol del jugador. No es al principio de nuestra carrera cuando tenemos claro eso de la gestión de lo que el azar nos da.

Ese concepto, o lo aprendemos poco a poco después de un juego errático o nos lo enseñan en los foros cuando  venimos a investigar después de dar muchos palos de ciego.

Eso está bien. Todo tiene un recorrido y casi no es casual llegar a un foro. El jugador ya sea neófito o perro viejo trabajando en modo libre llega el momento en que busca respuestas fuera de su enroque mental.

El jugador perdido solo tiene dos caminos; abandonar su lucha -a veces se le llama sueño- o acudir en ayuda de los que más sepan. 

El foro es un arreglo al que nos hemos acostumbrado y que quizá por eso mismo no le demos mucha importancia. 

Bucear por los entresijos de las páginas no es un trabajo muy apetecible pero es necesario y hacer apuntes de los puntos en los que queremos ahondar.

Es un tesoro casi escondido, no hay duda.

El tema de la gestion que comenté es muy controvertido.

Sé que me meto en un jardín complicado.

Recuerdo que se decía a veces que el jugador, muchas veces no sabe por qué gana ni por qué pierde. Y es verdad que es complicado saberlo. Podemos caer en la trampa de creer que en caso de acierto de la gestión, ésta sea por nuestra buen hacer, cuando podría ser por la suerte.

Ya sé que van a decir que eso se sabe si la buena gestión aguanta muchas bolas o muchas sesiones. Aún así podría ser por mor de la suerte, aunque en ese caso no nos importe mucho saber por qué ganamos.

Hay un factor que puede ayudar a saber por qué ganamos. Y es probando a jugar al tun tun. Sin criterios ni gestión y ver si tenemos buenos resultados en el medio plazo. Digo medio plazo porque no se puede hacer ese experimento durante muchas bolas so pena de perder el tiempo o peor aún nuestro dinero.

De nuevo alguien diría que jugar así también tiene un criterio y una gestión.

Ya dije que me metía en un jardín, así que me salgo antes de pincharme con un cardo borriquero.

Bien, puede que la gestión sea controvertida pero nos queda el criterio y la caja.

De todas formas, un plan con criterio y gestión de caja puede dar dolor de cabeza a mamá azar.

De todas formas reflexiono que cualquier plan con gestión tiene que tener un valor añadido y sin ese valor no sale bien.

Me refiero al bagaje. La experiencia suma puntos según lo he experimentado yo. Sin experiencia, un jugador necesita aplicar conceptos muy precisos y eso es difícil. 

Por eso, los que no estudian y además no tienen experiencia buscan un sistema programado. Necesitan que algo lleve la voz cantante a falta de ese bagaje enriquecido.

No faltan en los foros gente nueva que pregunta por cosas muy precisas. Solo les falta decir donde pongo la ficha. 

Esto no es una crítica sino una reflexión por lo que he visto en años.

Como aquí se trata de palabras, viene a cuento la palabra Pelete.

Hace años estaba yo jugando sentado en una mesa de black jack. Se acerca otro jugador y quiere jugar con mi posición. Yo no tengo objeción porque es una costumbre.

Antes de poner sus fichas en el tapete, el jugador me pregunta ¿eres un pelete?
Yo no entendí lo que decía y ahí acabo todo.
Ahora sé que se referia a que si yo era un contador de cartas o que jugaba con alguna estrategia. Esa es una de las definiciones de pelete.

Hay otras dos definiciones;

2. Hombre pobre, de pocos haberes.

3. En Canarias, persona enteramente desnuda, en cueros.

Es curioso pero esas dos definiciones también aplicarían a un jugador que perdiera.

En la primera acepción que cité como ejemplo de pelete en el juego, se extrae un fragmento de un foro de póker online, en el que se escribe.

"Con 7 puestos por mesa y tropecientos mazos no hay dios que haga un conteo decente y la estrategia básica solo da para pasar el rato a bajo coste, por lo tanto abandono el enorme esfuerzo que supone ser un pelete. Alguna vez intente una mezcla de estrategia básica y martingala jeje. cuando perdía doblar la siguiente. Eso se llama agonizar lentamente. Al final palmas fijo. Y aquí estoy dispuesto a echar el resto en el poker..."


No puedo ocultar que en principio, cuando el jugador me hizo la pregunta pensé que quería decir Petete, el del libro gordo.

Dejando claro que no soy un Pelete, creo que no es necesario serlo en los tiempos que corren.

Me explico.

Todavía hay gente (compañeros) que saben de lo que hablo cuando digo, que nuestro comienzo con la ruleta fue un tiempo de emociones, esperanzas y ganas de ganarle a la bola. Simple cuestión de demostrarnos que no era tan didifícil. 

A eso, también se sumaba querer jugar sin perder y por que no, ganar siempre.

La idea de ganar siempre la mata las primeras experiencias y vamos comprendiendo que se puede ganar sin ganar en todos los lances.

Creo que nuestra generación llegó tarde al trabajo del Pelete. 

Llegamos tarde a poder aprovechas las imperfecciones del cilindro como lo hicieron los Pelayo. Los cilindros son casi perfectos.

Llegamos tarde al conteo de cartas en el Black jack.

 Porque la banca aprendió la lección y cambió el barajar a mano por el croupier o tallador por el sabot donde se depositan seis barajas (en España según una ley del 2006).

Y encima, llegamos temprano a la información de los foros que no existían.

La opción era buscar formas de derrotar a la ruleta estrujandonos la materia gris. Muchos fuimos Marigni por descubrir secretos de las chances a fuerza de observar y hacer cuentas.

No nos hace falta ser Peletes con la información de que disponemos actualmente y gratis.

Lo peor que alguien nuevo puede decirnos es "donde pongo la ficha"


No existe el sistema ganador automático. Solo existe el estudio y la práctica sin fin.

Aprendizaje, práctica, azar, verdades absolutas...

No sé por que esta tarde comencé a barajar esos términos que son comunes en los foros de ruleta. Seguramente fue por un documental en la 2 canal de TV donde se hablo del azar, pero yo le buscaba significado desde nuestro punto de vista.

Alguien dirá qué el aprendizaje en el azar es vital.. Digo azar y no ruleta porque el azar es la primera causa y la ruleta solo una interpretación más.

Y la práctica. ¿Por qué se requiere la práctica? El azar no es un compendio de verdades absolutas. Y si definimos una verdad absoluta del azar seguramente estamos acertando, pero no sería práctico para nuestro propósito por cuanto la vida o ventana de juego es efimera en relación a esa verdad absoluta.

 El azar cumple a la perfección un axioma verdadero: todo vuelve al estado de un perfecto equilibrio.

Por lo tanto, la práctica debe ignorar esa verdad absoluta y basarse en algo más terrenal y alcanzable para el jugador pedestre. No digo que considerar conceptos basados en esa verdad sea perder el tiempo pues el conocimiento no necesita de lo práctico.

 El conocimiento por el conocimiento ya tiene su pago en forma de bagaje y placer aunque no nos sirva al propósito inmediato de nuestra necesidad de un resultado práctico. 

Conocimiento y práctica se pueden unir de infinitas maneras no siendo todas un fin a las necesidades que perseguimos. Es por eso que existen distintas formas de unirlas para conseguir un fin adecuado, y es de manera personal e intransferible que cada uno encuentre la suya ignorando el ruido mediático de intentar aglutinar un unico conocimiento y práctica para todos como si de una religión se tratara.

El conocimiento puede ser universal pero la práctica es inequívocamente nuestra, y por lo tanto, requiere de transpiración e inspiración.

Esta noche voy a masticar eso de la transpiración y la inspiración. A ver que sale...

Transpiración e inspiración.

Transpiración porque requiere trabajo.

Alguien dirá que si requiere trabajo no es lo mismo pensar duro que tirar la ficha a voleo que es lo más sencillo e intrascendente. Pero hay de todo. Unos creen que el criterio es indiferente y otros más, que todo es criterio, sea pensar duro o poner la ficha sin mirar. Y por último, otros aducen que "no hay sistema" y que es inútil cualquier intento de amarrarse a una idea encorsetada.

Pero no nos engañemos, transpirar es necesario en cualquier empresa que nos propongamos a menos que una suerte súbita o un gran cisne blanco nos bendiga.

Copiar un sistema o idea y llevarlo a cabo no es transpirar. El sudor de la frente ajena no sirve en la mayoría se los casos. Porque al cambiar de manos, la estrategia se complica por el efecto traspaso de manos.

Y que decir de la inspiración. Más bien yo lo interpreto por conducta y saber estar. 

La serendipia que tanto ha aportado al conocimiento científico y a la humanidad no nos sirve aunque nos salve una sesión. Otra cosa es que la inspiración fortuita (serendipia), aclare una estrategia difícil de digerir y solucione un juego en el medio plazo.

Más o menos quiero transmitir que hay que mojarse en tiempo, estudio y conducta ya sea con una estrategia nuestra o de otra fuente.

Para un jugador profesional, el azar, en toda su crudeza es su verdad, una verdad que tiene que creer, una verdad posible, su verdad universal.


¿Es esa verdad, algo estático? Eráclito de éfeso dijo que la realidad es cambiante y mudable 'panta rhei' (todo corre, todo fluye).


Son varias las verdades de un jugador y sus distintas consecuencias.


Está la verdad del PP, que corre y fluye hacia un juego siempre al límite, con premisas -sus verdades-, que son su religión, y sus consecuencias acordes a ellas (se siega lo que se siembra etc...).


¿Que es la Verdad? Eso se pregunta un jugador que ha pasado por varias etapas de juego destructor, al acecho de no sabe qué. Su desconocimiento le aboca a que su "estar en guardia" no recoja frutos.


¿Te ayuda la inteligencia a encontrar tu verdad? Borges tenía una duda y era "el otro nombre de la inteligencia" y esa es la fuerza más poderosa frente a la verdad. !Cuidado!, debemos huir del dogmatismo de una verdad equivocada o confundida. Y de sus sombras.


El jugador experimentado que quiere "vivir" -es decir, encontrar su verdad y el nombre exacto de la inteligencia necesaria que le haría ganar sostenidamente-, y no morir, estará en desacuerdo con Tales de Mileto, una vez afirmó que no había diferencia entre la vida y la muerte. Entonces ¿por qué no te mueres tú? Le preguntó uno. Contestó: porque no Hay diferencia.


Nuestra verdad no tiene por qué que ser la panacea a nuestro empeño, tenemos que perguntarnos que es lo que hay tras nuestra búsqueda, y si hay algo, alguna verdad con un nombre que asigne una inteligencia a la experiencia, puede que nos hagamos la misma pregunta que el científico Stefhen Hawking, ¿por qué hay algo en vez de nada?

Los números que vemos aparecer en el luminoso de una ruleta manual de casino tienen para nosotros una componente afectiva que nada tiene que ver con el verdadero mundo donde quedan aprisionados y en el que parece que todo está "medido". 

Cada fenômeno "actor" tiene su papel aprendido, y hoy en día, pocos secretos guardan los acontecimientos relacionado con el "mundo/azar" de la ruleta.

El jugador va componiendo una melodía peligrosa. Por un lado le atrae el lado lúdico. Y es que viendo una ruleta en funcionamiento, pocos dirían que no es un objeto o máquina para el divertimento.

Y por otro lado, quiere y necesita complementar la diversión con ganancias.

Aunque una ruleta parezca un medio para la diversión, el mundo de los números aleatorios es muy serio. Cada evento aislado y todo tipo de composiciones tienen su razón de ser. El espacio del azar tiene leyes y propiedades que hay que tomar en sero y nada tienen que ver con una imagen de jugadores abrazados a sus chicas con una copa en la mano y tirando fichas a voleo en el tapete.

El jugador que quiere estar en el lado serio, buscando una remuneración a sus esfuerzos (no a los exesos lúdicos), querrá comprender como es ese mundo, alejarse lo más posible de la tentación festera y estudiar y estudiar cómo de probable es tal acontecimiento o evento y cómo de probable es aquel otro.

Voy a serles sincero. La pasada noche soñaba que era una bola de la ruleta. Ésto, no debe extrañarles, a veces estamos desquiciados con tanto estudio.

Soy la bola de la ruleta.

Y, hay algunos puntos sobresalientes que quiero compartir. A menos que lleguen a la conclusión de que estoy en una mesa defectuosa o gastada, no traten de buscar un significado en cuanto a donde caigo, por si tuviera un sesgo interpretativo o repetitivo en el tiempo. 

Es verdad que hago cosas raras y cosas obvias pero eso tiene un significado explicable en términos probabilístico y estadístico, y por ahí van los tiros en cuanto a sacar rédito del juego. 

¿Debería tener miedo que la banca me descubra y me tire a la basura? No. Estoy mareada y ya nada me importa.

Ahora bien, tengan en cuenta mi comportamiento según que amplitud de plazos manejen. En el corto plazo les voy a parecer que les tomo el pelo, pero comprendan que cuando hago filigranas como repetir u olvidar eventos grupos etc, es algo a lo que estoy obligada por la configuración del universo que manejo y del universo que ustedes manejen según que órdenes de juego escojan.

En el medio plazo la cosa se vuelve más razonable y me pueden gestionar con distintas herramientas y paciencia, sin caer en la trampa de que yo o cualquier otro factor no probabilístico esté en su contra excepto usted mismo.

No, no hay demonios sino azar. Olvídeme y céntrese en su juego y en usted mismo con creatividad y sentido común...

Aunque no se lo crean, las madres inventaron el cero.

Las madres no solo son unas santas (Santa teresa como mínimo), también son filósofas (niño, eres tonto o qué) yo, que desde la cuna he tenido mi punto chistoso le contestaba: soy o qué. Y al ver su reacción me escondia temiendo un sopapo a mano vuelta. 


Nuestras madres también son matemáticas (si te comes el postre ahora, luego no hay nada) inventaron el 0. La nada más absoluta. Y te repite para énfasis con un tono de voz más sonoro silabeando cada palabra NO, HAY, NA, DA. Ríete tu del muñeco chuki. Un pepón bonachón al lado de las madres.


Las madres tambien son sicólogas. Si no te hubieras metido con él (tu hermano) no te hubiera escupido.


Y ahorá viene lo bueno: son sabias. Tú lo que eres un enteraillo. Esta palabra creo que aun no fue aceptada por las reales posaderas de esos catedráticos de la lengua.


Mi madre me podía decir tonto del culo u otra acepción de pirado y yo tan pancho. Pero al decirme enteraillo sentía que era algo muy malo. Ahora de mayor, ya sé que en cada sitio hay un enteraillo. Esa persona que lo sabe todo sin saber nada. Que abusa verbalmente de los que considera más débiles o bonachones. Porque el enteraillo es cobarde. Sólo se mete con los que piensa que se lo van a tolerar todo. 


Las madres son unas santas. Son de todo, sin haber hecho un master de nada. Y todo por nuestro bien futuro. Pero no tienen la culpa si después de tanto trabajo les sale un enteraillo.

Una bola de teflon, o de marfil si el casino es conservador de costumbres, es lo que un jugador necesita para enjugarse las lágrimas de su desespero.


Otros prefieren acordarse de las madres y hermanas de los croupieres (no vayan a Google, el plural croupieres esta aceptada por los señores orondos de la lengua).


Otros más, solo cuchichean maldiciendo muy bajito. Porque así siguen siendo a los ojos de los demás personas civilizadas. 


La pereza mental. La ambición desbordada. La ignorancia supina de los conceptos básicos; degradan a las inocentes bolitas de teflón o de marfil. A las santas madres y hermanas de los croupieres. Y mancilla los labios de los murmuradores silenciosos.


Pero bueno, me estoy yendo por las ramas espesas de mi bagaje en las salas. Porque solo quería decir que los japoneses han inventado una bolita avanzada que supera todo lo conocido hasta ahora. Una bolita que ignora la muñeca del croupier. Que desciende por el tobogán del plato con velocidad uniforme. Que sabe esquivar a los diamantes (esos intrusos rombos de metal). Que no rebotan de casilla en casilla. Evitando así salir de una cuando ya está dentro y el jugador agraciado ya se ve ganador. Y que no se queda dando vueltas como un borracho en el fondo, esperando que algún cliente impaciente mueva la mesa.


Pero, eso no es todo...

Con el nuevo esférico (¿de plástico?), los escotes generosos de las señoras de cierta edad están a salvo. 

Yo mismo recogí una vez una bola díscola que saltó del plato y fue a parar debajo de otra mesa. La devolví al dealer que a la sazón ya había tirado bola con una de repuesto.

Pero yo creo que esa nueva pelotita no va a solucionar los problemas de los PP.

Me estoy acordando del famoso nudo gordiano. Esa expresión significa un problema o dificultad que no se puede resolver. El juego de la ruleta es un nudo gordiano. Sin embargo, el problema del nudo gordiano fue resuelto con una solución creativa. O como se dice ahora: 
Usando el pensamiento lateral".

Un tal Frigia, al que le enfrentaron al reto de desatar el nudo. Solucionó el problema cortándolo con su espada y diciendo: «Es lo mismo cortarlo que desatarlo»

Así que, ni bolita nueva ni otros inventos. Cortar el nudo es la solución. Con estudio y trabajo duro.

Una aclaración: fue Alejandro magno quien cortó el nudo gordiano y pronunció la famosa frase. Que nos enseña que algo muy bien atado puede tener otra solución que solo encontrarán los que abren su mente y olvidan lo conocido.

Jamas pensé que para aprender algo, se tenía que desamprender otra cosa.

Yo pensaba que era suficiente con ir aumentando el conocimiento general. Pero no.
Parece que es un tal Alvin Toffler al que se le atribuye una frase que habla de que “los analfabetos del siglo 21 no serán aquellos que no sepan leer ni escribir sino aquellos que no sepan desaprender“

Eso no es nuevo para mí. Mi madre me decía muchas veces cuando yo le replicaba alguna cosa que a mí me parecía buena: "olvídalo y haz lo que yo te digo" y yo creo que olvidar es igual que desprender.

Tuve que olvidar muchas cosas, porque las madres son más sabias. Sin embargo en el colegio, las reglas eran otras: aprender de memoria lo más posible y no olvidar nada. Todo valía. Todo era bueno. Todo servía para algo en la vida. La suma del todo era de un valor incalculable y nos hacía sabios. Y la frase de mi madre "olvídalo" resonaba en mi cabeza constantemente como algo que había que hacer a veces o muchas veces.

De estos 4 pasos para aprender a desaprender que copio de internet, me parece la más interesante la que dice "construir una lista donde se establezcan nuevas creencias" Y estos 4 pasos son los siguientes:

Paso 1. Identificar cuáles son las conductas, comportamientos, patrones o pautas limitantes.

Paso 2. Hacer el inventario escrito de todas esas conductas indeseables e inconvenientes.

Paso 3. Construir otra lista donde se establezcan nuevas creencias.

Paso 4. Practicar constantemente las afirmaciones positivas.

Así que, establecer nuevas creencias...
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Olvidar no es nada fácil y desaprender menos aún. 

"Nunca olvidaré lo que me hicistes" "nunca olvidaré lo que aprendí esos días"

Parece que estuviéramos condenados a no olvidar y repetir siempre los mismos errores o los mismos aciertos.

En realidad, debe haber una diferencia o matiz entre el significado de olvidar y desaprender. Olvidar algo no implica necesariamente poner otro recuerdo en su lugar. Pero el concepto desaprender sí contiene la condición de aprender otra cosa en lugar de lo desaprendido. Y que ese concepto nuevo mejorado de remplazo sea mejor. Más actual y más efectivo.

Los puntos 1 y 2 del post anterior (que copié de un lugar de internet), son los que ayudarán a encontrar los conocimientos que son limitantes. Y que nos llevan a conductas indeseables.

Lógicamente, ésto, lo queremos aplicar a nuestras actividades de juego con el fin de obtener beneficios. Puede que después de un análisis concienzudo, descubramos que lo que hay que desaprender relativo a la actividad del juego, sea más de lo que sospechábamos.

Desaprender que la martingala sea una opción de juego buena. 


Desaprender que con un cursillo breve de algún foro se este preparado para enfrentarse a la ruleta.


Desaprender que un sistema de alguien sea también bueno para nosotros.


Desaprender que sin trabajo duro se pueda ganar.


Desaprender que con practicas inocuas con un generador ya lo tenemos solucionado, porque el juego real añade otras variables relativas a la conducta y otros impedimentos como los sesgos cognitivos.


Desaprender que el casino se va a quedar quieto cuando te vea ganar.


Aprender entonces estrategias de camuflaje.


Y desaprender que vivir del juego sea un camino de rosas como se muestra en algunas películas.

Al leer por primera vez sobre la matemática abstrusa de Manrique me acordé de mi filósofo favorito Lubwin Wittgenstein que a propósito también era ingeniero aeronáutico, dominaba las mates aunque no sé si abstrusas o no, y en una ocasión se portó de forma abstrusa porque a pesar de ser de izquierdas citó de un poeta la frase "pues los dioses ven por doquier", añadiendo despues que esa frase le podía servir de lema.

Es curioso y raro que Wittgenstein se equivocara al citar pues la frase en realidad decía "for the gods are everywhere".

Y es verdad de la buena que los dioses están por todas partes. Recuerdo que en el foro joker escribí un artículo sobre Tales de Mileto en el que mencionaba otra frase de Tales: "todas las cosas están llenas de dioses" y aunque Tales el griego no llegó a conocer Internet, sí hubiera afirmado que la nube en la que todos entramos a menudo, tambien está llena de dioses. Aunque como alguien dijo; algunos son dioses menores, diosecillos venidos a menos que intentan arañar el cielo de la fama núbica enviando a diestra y siniestra al infierno a los que no les idolatran con fervor.

Perdono a mi filósofo favorito Wittgenstein el desliz y por supuesto, también perdono a algún dios menor que me mande de cabeza al infierno por descreido.

Gestión de la frustración

La frustración es un sentimiento inherente a la naturaleza humana.

En muchos casos, la frustración se puede comprender.

Quizá, la parte negativa de este sentimiento sea las consecuencias de no saber entenderla y gestionarla.

Muchas veces, sentirse frustrado es como sentirse engañado por algo o alguien. La frustración es un sentimiento que también denota una derrota o un errar el blanco de un propósito definido o perseguido, y en el juego de la ruleta es común sentirse así cuando hay un desvío de nuestros propósitos.

Es importante para el jugador estar consciente de lo que está sintiendo. A veces ocurre que nuestros planteamientos de juego en un momento dado son correctos y comenzamos un juego productivo, luego, según nuestro planteo cerramos la estrategia, mas tarde comprobamos que nuestra idea no sólo era correcta sino correctísima y hubiéramos ganado mucho más si hubiéramos seguido unas bolas más.

Creo, que lo correcto en estos casos es analizar que estos casos se dan pocas veces. La mayoría del tiempo acertamos una estrategia a medias o no la acertamos, y que la prudencia apoyando nuestras desiciones en las muletas de la probabilidad y otras es lo más acertado cuando se trata del azar. La frustración también puede aparecer en estos casos que menciono en este párrafo a pesar de que salimos en positivo.

Sentirse frustrados es comprensible y hasta humano pero, cuando se trata de jugar con fundamento, de obtener ganancias sostenidas, es necesario que ese sentimiento no afecte a la interpretación de las jugadas siguientes.

No es difícil darse cuenta que estamos frustrados en un momento dado. Si eso ocurre dejemos el juego y analicemos. Alguien dirá que eso es cosa de los ascetas o superhombres, pero sólo es cuestión de acostumbrarse.